“Warm Up” es el tercer EP de Bad Gyal. Tres años después de “Worldwide Angel” que le han servido para convertirse en una de las artistas más conocidas de nuestro país, Alba Farelo continúa su carrera hacia el éxito internacional. Este trabajo ve la luz a la espera de un álbum que se lleva haciendo de rogar durante un lustro, y que permitirá (o no) ver el talento de Bad Gyal no solo como hit maker sino como una artista capaz de trabajar con conceptos más elaborados. Mientras tanto, “Warm Up” sirve, obviamente, como calentamiento. Siete bangers de Bad Gyal que sonarán muchísimo, seguro, en todas las ciudades de España y, también, pero algo menos, en el continente americano.

A destacar de “Warm Up”, además de la inclusión de “Aprendiendo el sexo”, la mejor canción a nivel lírico de Bad Gyal desde “Más raro”, es la calidad que tienen todas las producciones y los beats de todas las canciones. Scott Storch (Dr. Dre), Jared Harris (Playboi Carti), Nely El Arma Secreta (Daddy Yankee, Ñejo) o El Guincho acompañando a un Fakeguido que, como Penny y Desmond en “Lost”, es la constante musical a lo largo de la carrera de una Bad Gyal que no deja de mejorar sin innovar demasiado. Algo que implica una fórmula fantástica pero poca intención de jugársela.

Parece mentira, pero, hace menos de cinco años, un EP como este de una artista española sería algo absolutamente inconcebible. Los puretas y puristas del hip-hop nacional supongo que fliparían si supieran que uno de los responsables de “Still D.R.E.” trabaja con Bad Gyal, una chica de menos de veinticinco años que hace canciones explícitas, y no con un pesado que se las da de poeta.

“Iconic”, “44”, junto a Rema, o “Judas” con KHEA, son algunas de las canciones que ha presentado Bad Gyal en este EP. Las colaboraciones vocales son menos interesantes que las musicales, sobre todo Rauw Alejandro destrozando “Zorra”, y con la excepción de Juanka en “Blin Blin”, pero sirven como muestra de que Bad Gyal tiene el respeto y las conexiones para trabajar con los artistas más destacados del mundo del urbano a nivel internacional. Su fórmula, a caballo entre Latinoamérica y Jamaica, caribeña, al fin y al cabo, es convincente y muy solvente.